Los intereses negativos: devolver menos que lo que te han prestado

Imagen: az1172

Esta semana hemos conocido que Alemania ha conseguido colocar deuda en su mercado primario con intereses negativos. Una noticia realmente histórica que nunca se había dado en este país. ¿Significa esto que Alemania devolverá menor cantidad de dinero que el que le han prestado? Pues sí, significa exactamente esto. Es decir, teniendo en cuenta que los intereses alemanes en esta última emisión ha sido del -0,012%, si alguien comprara deuda con esos intereses e invirtiera 100.000 euros, quiere decir que el estado, cuando termine el tiempo de vida de ese título de deuda, devolverá 98.800 euros. Pero, ¿porqué los inversores invierten una parte de su dinero en bonos de un estado renunciando a una parte de su dinero durante un tiempo, si esto no les va a proporcionar ninguna rentabilidad, y teniendo en cuenta que otros productos financieros, como los depósitos bancarios o los  bonos de otros países si se la proporcionan? 

Esto es complicado de entender para cualquier persona que invierta una cantidad de dinero en un depósito que le proporcione una rentabilidad adicional a cambio de renunciar a esa parte de su dinero durante un tiempo, pero en realidad esto no funciona así para los grandes inversores, los fondos de inversión o los planes de pensiones. Aun así, no es difícil de entender porqué lo hacen.

Como ya hemos dicho, un pequeño inversor como podemos ser cualquiera de nosotros colocamos un dinero que sabemos que no vamos a usar durante un tiempo en un depósito bancario, en bonos del estado,   comprando acciones de una empresa por nuestra cuenta o invirtiéndolo en fondos de inversión. Sabemos que este dinero proporcionará una rentabilidad en función del riesgo, que puede ser positiva o negativa (en productos de renta variable no sabemos con certeza cuál va a ser la evolución), pero en principio también  sabemos que en los productos de renta fija, como los bonos del estado, conseguiremos un dinero adicional al inicialmente invertido. En caso de no encontrar un producto que satisfaga nuestras necesidades no lo invertiremos, manteniéndolo con nosotros, y mucho menos si nos devuelven menor cantidad de lo invertido, ya que nos compensaría mantenerlo en una cuenta bancaria a perder una parte.

Pero los inversores institucionales no funcionan así. Los grandes gestores de carteras de fondos de inversión no pueden meter el dinero del que disponen debajo de un colchón, si no que tienen que estar continuamente colocándolo en los diferentes productos financieros, ya sea en renta fija o en renta variable, eso ya en función del tipo de cartera del inversor. En algunas ocasiones, los fondos de inversión garantizan una parte del dinero que los diferentes inversores han colocado en el mismo, invirtiendo una gran parte del mismo en renta fija, y sobre todo en bonos del estado; por ejemplo garantizando un 90% del dinero inicial invertido.

Por tanto, la única razón por la cual los inversores renuncian a parte de su dinero es por dejarlo en manos seguras, y ahora mismo Alemania es un refugio que cumple esos requisitos. Los inversores renuncian a recibir una retribución extra, e incluso a perder dinero, con tal de que se les asegure al menos una parte de lo invertido, cosa que garantizan a sus clientes de los fondos. Pero, ¿porqué sucede esto? En un escenario actual de posible recesión, bajada de tipo de interés por parte del BCE, etc. en general la actual coyuntura económica hace que los inversores ya no se fíen ni de los productos más seguros, y deciden perder una parte de ese dinero con tal de que esté en manos seguras.

Esto también ha sucedido tradicionalmente en países como Suiza, donde las grandes fortunas suelen depositar su dinero en depósitos en los grandes bancos con intereses negativos, renunciando por tanto a una parte del mismo, por estar a buen recaudo. De todas formas, son circustancias bien diferentes, y es posible que esto nos sirva como referencia para ponernos en perspectiva la situación futura de la economía mundial, ya que si estos inversores prefieren perder una parte de su dinero es porque el futuro lo ven realmente negro, y no se fían en absoluto de ninguna otra opción.